Los Fiery Furnaces, como Woody Allen, parecen estar empeñados en lanzar trabajo nuevo de manera anual. Al igual que Woody Allen pareciera que podrían comprometer la calidad del trabajo en el proceso. Y al igual que los fans fans de Woody Allen, a los fans fans de los Fiery Furnaces no nos importa, con tal de tener más.
Lo que nos lleva a I’m Going Away, disco número 8 (9 si contáramos Remember, que por mera ejecución deberíamos) de los hermanos Friedberger, y material que inmediatamente se adentra en un terreno seguro y convencional, muy lejos de los sonidos a los que nos tienen acostumbrados. Lejos quedan las pretensiones prog que los caracterizan y nos dan un disco rock que parece haber sido compuesto en los 70’s. Matthew y Eleanor se escuchan relajados, menos preocupados por sorprender y más preocupados con la música. El piano toma un papel protagónico, dando un aire de dulzura.
El primer sencillo es también la canción más destacable: “The End Is Near”, una melancólica pieza que parece haber salido de los créditos de una película vieja de Sidney Lumet. Y el disco se mueve sobre esas texturas, con una facilidad que recuerda al EP, y nos aleja de la obtusa experimentación de Rehearsing My Choir.
Al final, los acostumbrados a ser sorprendidos se sentirán un poco desilusionados. Por otro lado, los que habían sentido trabajo para entrarle al grupo encontrarán en I’m Going Away una buena puerta. No importa que sea el disco más normal del grupo, sigue siendo más imaginativo que muchas de las cosas allá afuera.
Imprescindible 2009.
Primera parte.
Segunda parte.
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